Cuentas por cobrar
envejecidas, el impago a los artistas, y
la necesidad de agilizar la gestión recaudadora, centraron la atención de los participantes a la
Asamblea de balance del Fondo Cubano de Bienes Culturales, Filial Granma,
celebrada en Bayamo.
Durante el
encuentro trascendió que si bien la referida entidad dejó su impronta en la
etapa precedente, con resultados enaltecedores de los valores estéticos de la sociedad, aún
existen empresas deudoras, cuyos impagos repercuten negativamente en la
economía y criterios de los creadores y trabajadores del sector.
La Lisetera Cayo Confite, de Manzanillo el restaurante
La Cubana, de la capital granmense, entre otras obras sociales, muestran la dedicación,
empeño y amor de los asociados
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