Una mirada que te acerca al mundo de los escritores y artistas de la provincia de Granma, Cuba.

domingo, 24 de noviembre de 2019

Guapachá



Con la cabeza repleta de imágenes, metáforas y epítetos,  recorre diariamente  la ciudad el bayamés Luis Orlando Quesada Arévalo -Guapachá-, hombre colérico y mente pródiga que no descansa y vive para la composición musical.
Por estos días celebra 60 años de vida artística, justificado motivo para evocar La herencia de mis abuelos, lo relacionado con La mudanza, su peculiar forma de decir Deja amarte a mi manera o el desmedido romanticismo presente en el  tema Tú me provocas un beso.  
Es un hombre inquieto y creativo, con una trayectoria envidiable: primer director del Centro provincial de la música en Granma, presidió la Filial de Música de la Uneac, registrado como miembro de la Sociedad de autores y editores de España y del Comité de música internacional de la UNESCO…
Atesora más de 130 composiciones entre canciones románticas, sones, merengues y guarachas, con las que hace gala a su nombre, Orlando, de origen germano y que significa la gloria de su tierra.
RETROSPECTIVA
Con apenas ocho años de edad frecuentaba la bodega de Pío Rosado y Figueredo, en Bayamo, acompañado de dos latas vacías de puré o de betún,  que al percutirlas emitían un sonido contagioso.
La gente coreaba y aplaudía lo que el pequeño  ejecutaba, hasta que una mañana llegó hasta allí Ernesto Reyes, apodado El Mago, un buscavida ambulante, facilitador de  billetes de lotería.
En  una mano agitaba el sortilegio económico con los números de suerte y en la otra la  oferta del día: pan fresco. Aquel  singular “concierto” rodeado de seguidores le llamó la atención y de inmediato se interesó por el muchacho.
-A partir de ahora te llamarás Guapachá y recorrerás conmigo la ciudad acompañado de tu música, te daré un pan diario y algo de sustento para aliviar los gastos de la familia.
Así quedó bautizado  este juglar criollo, distinguido por su aporte a la música cubana e Hijo Ilustre de Bayamo, título conferido en sesión solemne de la Asamblea municipal del Poder Popular, por el aniversario 506 de fundada la Villa de San Salvador.
OPINIÓN AUTORIZADA  
Idael Peña Castillo, es el Director técnico artístico de la Empresa provincial de la música y los espectáculos Sindo Garay, y conocedor de la obra artística del cumpleañero:
“El aporte de Guapachá a la música cubana es infinito, transitó y por diferentes agrupaciones y proyectos del territorio, premiado en eventos nacionales: Cantándole al Sol, festivales de música infantil Pequeño Príncipe, Sindo Garay, Canción para una Ventana…
“Con una pedagogía única, Guapachá es capaz de transitar por lo académico y popular con la misma entrega e  intransigencia: La noche del bolero, de la Uneac y sus programas en la Radio y en la Televisión, así lo testifican”.
Ahora que lo conoces mejor, salúdalo al pasar y regálale un epíteto, un símil, una imagen, una metáfora …, para que multiplique el calendario perpetuo de su vida y de su mente.





sábado, 23 de noviembre de 2019

Trova manzanillera, una historia… el festival



La trova, como expresión musical, no es un producto netamente cubano, su origen se remonta a los años terminales del Siglo XI, cuando en la municipalidad francesa de Provenza, germinó el estilo trovadoril.
A finales del Siglo XVIII y principios del XIX se introduce en nuestro país por la ciudad de Santiago de Cuba, y a finales de los años 20 y principio de los 30 del XX, llega a Manzanillo, territorio que se convirtió  luego en la tercera ciudad del país en incorporar mujeres al movimiento trovadoresco.
Refieren conocedores de la materia que hasta en los programas intermedios del Teatro Manzanillo, las voces y guitarras del dúo conformado por Pura Benemelis y María Raga constituían beneplácito para el público.    
De forma paralela, trabajadores del puerto, zapateros, barberos, maestros y carpinteros se unían ante el naciente movimiento, para desplazar sus voces y guitaras en serenatas y asaltos culturales por cualquier lugar del terruño.
Si bien en la Ciudad del Golfo, el  máximo exponente de esta actitud romántica ante la vida fue Carlos Puebla, otros viejos trovadores como Joaquín Codina, Emiliano Ponciano, Julio Gutiérrez, Eduardo Saborit, Félix Escobar, Lalín Riera, Daniel Alarcón, Hilario Paneque y René Guerra, también formaron parte de la vieja tradición romántica..
Tríos como La Rosa, Los Caminantes, Los Bohemios, el tradicional cuarteto Voces de Cuba…y otros cultores que tras cumplir agotadoras jornadas como trabajadores de otros oficios ofrendaban su aporte a  la cultura local.
Para finales del presente mes, la Casa de la trova, radicada en la céntrica esquina de Merchán y Masó, abrirá sus puertas a la 24 edición del Festival Carlos Puebla Concha in memoriam, trascendental momento para compartir con los exponentes más auténticos de esta forma musical, cubanizada en el tiempo.



viernes, 22 de noviembre de 2019

Gran Premio Caracol



El realizador de la TV Serrana, Carlos Yosvany Rodríguez Rodríguez, conquistó el Gran Premio -No ficción de cine-  en la edición 41 del evento Caracol 2019, con el documental Las piedras, Los Perros, la Revolución.
Filmado en la comunidad de Los Perros, en Buey Arriba, -uno de los municipios de la Sierra Maestra, en la suroriental provincia de Granma, y que integra el Plan Turquino- el audiovisual testifica la historia del jubilado Luis Rojas, vecino del lugar, quien, con amor, empeño y esfuerzo edificó un parque de piedras, dedicado a  la Revolución cubana y a los líderes que la hicieron posible.
El portal de la Cultura -Cubarte- informó que en esta ocasión los jurados  evaluaron 249 obras, de 370 realizadores, y entregaron más de 70 premios  en Cine, Radio, Televisión, Crítica y Locución.
El Caracol tiene como propósito contribuir al desarrollo artístico de los medios nacionales de difusión y estimular la calidad de las obras de los creadores miembros de la Asociación de Cine, Radio y Televisión de la Uneac, precisó Cubarte.  

jueves, 21 de noviembre de 2019

Regresó Grandanza de México



Con la intención de mostrar  que la vida es más que sus problemas, surgió en México el festival  Rompiendo fronteras, al que asistieron    grupos de diferentes países y también Grandanza,  de Bayamo.
A su regreso, Félix Carballo Elizalde, director y coreógrafo de la compañía, ofreció sus impresiones:
“El encuentro tuvo por sede al Centro superior de arte Toltecallí, en el Estado de Nicolás Romero, se realiza a inicios de cada noviembre, celebrando el Día de los muertos, que no obstante su nombre, es la fiesta más linda en ese país.
“Presentamos las obras Todo mezclado y Mujer buscando su intimidad, una proyección de bailes populares cubanos, que tuvo una impresionante aceptación del público.
“También hicimos varias puestas de Vagabundo y Todo mezclado en Ciudad de México, San Luis de Potosí y en  la comunidad de  Olivar,  en el municipio de  Naucalpan.   
“Fueron  15 días de intercambio amistoso con valiosos exponentes de la danza contemporánea, para nosotros resultó un  evento de mucha fuerza  y de aprendizaje, los talleres  de danza aérea y la danza llevada al yoga constituyó  algo novedoso en el grupo”-precisó Carballo.
Grandanza es una compañía granmense, especializada en temas relacionados con  los conflictos sociales, la violencia contra la mujer y otros temas de la contemporaneidad.
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domingo, 17 de noviembre de 2019

Una voz, un locutor



“Crecí junto a la décima, el punto guajiro, los guateques y aunque siempre acompañé al viejo en esos trajines, nunca me llamó la atención ese mundo, mi sueño era ser médico y como no me la otorgaron,  opté por una militar que, finalmente, deseché.
“Un día acudí con mi padre a la grabación del programa campesino, había crisis de locutores y me propusieron grabarlo, era el 15 de marzo de 1993, iniciaba mi primera incursión en la Radio.
“Pasado algún tiempo supe que Manolo Jorge Ross Suárez, profesor de locución y director de programas, impartía un curso, llegamos a su casa y la respuesta fue tajante: ‘A tu hijo no lo quiero en mi curso, si aceptó hablar por un micrófono desconociendo lo más elemental de la técnica, que busque a otra persona que le enseñe o aprenda solo’.
“Cuando salimos de aquel hogar, dije, voy a ser locutor.
-Yo te voy a ayudar, aseguró mi papá, y me dejó en manos de Osvaldo Aguilera, presentador holguinero, uno de los más destacados del país.
“En esa hermana provincia permanecí cerca de dos meses: cada día hablábamos de la técnica radial, debatíamos el noticiero, recibía una preparación intensa y trabajaba en algunos espacios como Señal, MFM…,  volví a Bayamo con una preparación más sólida.
EL VASO COMUNICANTE
“Mi padre Mariano Hernández Rodríguez, poeta, decimista e improvisador, llegó a Bayamo en el año 1951, pronto se percató de que la ciudad no contaba con un programa radial para difundir esa corriente musical.
“Habló con Manuel de Regla Díaz, dueño de la emisora, quien le expresó: ‘Búscate a los patrocinadores y te doy el espacio’.
“La audiencia fue tan grande que se multiplicaron los benefactores, Regla Díaz, al percatarse de los dividendos económicos de la propuesta, aclaró: ‘A partir de ahora te quedas con las promociones de la Nestlé, El Encanto o la fábrica de refrescos Kawi y los demás son míos, o te vas de la emisora’.
NUEVAMENTE A LA CARGA
“Años después llegó Nelson Moreno de Ayala, un consagrado radialista procedente del Centro de estudios del Instituto Cubano de Radio y Televisión e integrante de la vieja cátedra de locutores, quien impartió un curso de superación, me incorporé y recibí  el diploma correspondiente.
“Justamente el 1 de julio de 1993, día que se jubiló mi padre, me inicié como trabajador de CMKX Radio Bayamo y, cinco meses después, realicé mi primera presentación en vivo, a la orquesta Original de Manzanillo, en la Plaza del Himno.
“A partir de entonces asumí la conducción de varios espacios y sesiones radiales y televisivas; el programa Panorama campesino, Frecuencia 12, Entre signos, Perspectivas, los comentarios deportivos…”.
Este joven locutor, multipremiado en festivales de la Radio y la televisión cubanas, participó como delegado en el VII Congreso del Partido y en la Conferencia nacional del Sindicato de la Cultura.
Ostenta el Premio del barrio, conferido por la Coordinación nacional de los CDR, las distinciones Félix Elmusa, Raúl Gómez García y Aniversario 50 de la Unión de Jóvenes Comunistas.
LO INESPERADO
“Me encontraba en Cinco Palmas, Media Luna, para participar como locutor en el acto por el reencuentro de Fidel y Raúl en ese histórico lugar, mientras compartía el receso con otros compañeros,  llegó un campesino interesado en verme.
“Le comunicó su inquietud a Rolando González, el funcionario que nos atendía, y nos presentaron:
-Yunel, él te quiere conocer.
“Me paré frente al hombre que triplicaba mi estatura, con cierta duda preguntó:
-¿Qué, tú eres Yunel?… por la voz que pones en la radio pensé que eras un hombracho.
“Aquella expresión generó la carcajada colectiva, también el nacimiento de una amistad con aquel campesino y entre los bromistas del equipo, la imborrable frase del lugareño, repetida varias veces a manera de burla.
Así transcurre la vida de este singular artista, que un día desafió el micrófono hasta imponer su voz entre los grandes acontecimientos de la suroriental provincia deGranma.