Manchadas
de sangre por las tantas agresiones perpetradas contra países del mundo, las
garras del imperialismo yanqui se aprestan a lanzar un zarpazo asesino contra
el hermano pueblo venezolano y su proceso revolucionario, conducido por el Presidente
constitucional Nicolás Maduro Moros.
El
Libertador Simón Bolívar expresó: “Los Estados Unidos parecen destinados por la
Providencia para plagar la América de miserias en nombre de la libertad”, palabras
que en estos tiempos recobran aplastante vigencia:
Donald
Trump, un maniático disfrazado de presidente del más poderoso imperio del orbe,
ha devenido gendarme internacional, olvidando que fue precisamente un
presidente de ese país norteño, Abraham Lincoln, quien sentenció: “Aquellos que
niegan la libertad a los demás, no la merecen ellos mismos”.
Pero
una vez más la cordura colectiva tendrá que imponerse para impedir la barbarie;
de lo contrario la guerra, que en estos momentos pende como espada de Damocles
sobre un pueblo hermano, terminará cercenando la vida de personas inocentes:
hombres, mujeres y niños amantes de la paz y el progreso social que hasta hace
muy poco era un hecho tangible en ese país sudamericano y realización del
inolvidable Comandante Hugo Chávez.
Ciudadanos
del mundo, hablamos en nombre de los escritores y artistas granmenses, que
desde este territorio libre de América condenamos las amenazas yanquis contra
Venezuela; nos solidarizamos con ese querido país y expresamos nuestro respaldo
irrestricto al Presidente Nicolás Maduro.
Es
necesario, como expresó el apóstol José Martí ¨(…) …impedir a tiempo que los
Estados Unidos (…) caigan con esa fuerza más sobre nuestras tierras de América".
Y con Martí repetimos: Déme Venezuela en qué servirla; ella tiene en mí, un
hijo.
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